lunes, 9 de marzo de 2009

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”Screen feeders”

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Cuando viene un editor y te dice que le hagas una cabecera para un programa, lo primero que preguntas, en buena lógica, es que cómo se llama el programa. El nombre de un programa en mi opinión lo es todo: te da pistas sobre su contenido, su estilo, su tono, muchas cosas.
Ahí es donde empiezan todos tus quebraderos de cabeza, porque casi siempre, en un 99,9 % de las ocasiones (dejo un 0,1 por si le ha pasado a alguien lo contrario alguna vez), el programa no tiene nombre, “porque lo están pensando”. También por lo general estará sin decidir el contenido, el presentador, si tendrá vídeos o invitados, si durará media hora u hora y media, pero esperan que en dos días tengas preparada la línea gráfica, la cabecera y los decorados, y bueno, lo de las músicas lo prefieren elegir ellos.
Entonces, ¿Qué hacer? muy fácil, hay que hablar con los Screen Feeders, término recientemente acuñado por uno de ellos en el departamento de Grafismo de mi empresa: Los cebadores de las pantallas o alimentadores de pantallas, es decir, el diseñador gráfico de la casa.
Este amable operador de Mac, creador de mundos paralelos, de fondos insospechados y rótulos animados, es tu amigo, tu confidente y tu enfermero. Nunca pronuncia la palabra imposible, y sufre en silencio las inclemencias de las innumerables variaciones que que acosarán al proyecto. Enseguida te propondrá unos fondos en movimiento y un decorado virtual con columnas y unos paños estupendos haciendo ángulo o creando perspectivas, y además te abre un espacio maravilloso para una pantalla grande que puedes usar como fondo donde poner imágenes sobre el tema del que verse el programa, etc.

Pero también él tiene una pregunta para ti, el realizador, y es la siguiente: de imágenes...¿qué vas a meter?. Él necesita saberlo porque su mente trabajará con esas imágenes para fabricarte todo lo que te ha ofertado.
Es importante tener preparada la respuesta, que si no sabes ni de qué trata el programa pues ya se imaginará uno a que te agarras.Normalmente te figuras que si no hay nada decidido es porque no hay presupuesto, por lo tanto tampoco hay nadie pensando, no hay equipoasignado y en realidad eres tú y el grafista el equipo de dos que tendrá que inventárselo todo. Si no hay presupuesto no hay derechos, o sea, la música será de librería o editorial, es decir sin alma, y las imágenes deben ser genéricas, que no describan a nadie, que no muestren nada, por supuesto también sin derechos. Es difícil pero en ese agujero es donde yo me gano mi sueldo.

Así pues, con ayuda de tu mano derecha, el screen feeder, te inventas cualquier cosa. Valgan algunos ejemplos maravillosos como el decorado de la foto de arriba de mi gran amigo y salvador Kiko Pérez, al que quiero homenajear desde aquí, pues esta última vez realmente me ha salvado la vida gracias a unas fotos que hizo él mismo en un viaje a Nueva York y a esa cabeza suya. Desde luego como alimentador de pantallas no tiene precio. Bendito sea.


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